martes, 25 de mayo de 2010

Algo sobre mí

Soy Licenciada en Historia del Arte desde abril de 2004.
¿Ejerzo????
Noooooooooooooooooo.
Obviamente, sé que la respuesta no sorprende a nadie. Lo que sería una sorpresa es que la respuesta fuese afirmativa.

Y en todo esto, a su vez, no hay nada sorprendente, ¿verdad?
Dejénme decirle que yo suelo encontrar sorprendente que nadie se sorprenda de muchas cosas. Eso sí que me deja atónita.
Y como esto, mil cosas más.
Vamos a ver: ¿es normal, digo yo, no tener la mínima posibilidad ni siquiera de ejercer tu profesión de la forma que quieras (no estoy hablando de ser profesora de secundaria), ya que, por ejemplo, en ningún momento a la universidad se le puede decir NO a un pago?
Es que hay cosas que por su propio funcionamiento dejan patidifuso a uno, y macho, como es lo común, pues vamos pa´lante.
Como mi titulación, hay muchas más. Cuando lo dices, la gente dice: ea, si es que no hay trabajo. Si es que son letras...
Y tan asumido, como si eso fuese, yo que sé, una puta mierda.
Estoy hasta la polla de escuchar comentarios de ese tipo. Porque sólo indican una cosa: el descerebramiento tan apabullante al que ha llegado esta sociedad.
Parece que encima tengo que cumplir cadena perpetua por haber seguido mi propia motivación....o sea: eso de ser libre, olvídalo.
Cuanto antes, conviértete en autómata, que es lo que hay que hacer.
Se supone que habría hecho mejor estudiando por ejemplo una ingeniería.
Vale.
¿Y qué pasa si yo disfruto más estudiando a Velázquez?
Pues eso da igual. Lo que yo quiera, mi voluntad, tres cojones importa, porque "no es rentable".
Hace un tiempo, un gilipollas como la copa de un pino me dijo, con aires de superioridad (era topógrafo...inclinémonos): "la filosofía no da de comer".
Frase para quedarse a cuadros, de verdad.
Que la filosofía no da de comer (me encantaría que el capullo ese, que además era un puto (y lo seguirá siendo, seguro) picha floja, y tenía un problema de la hostia con sus aires de macho respecto a las mujeres de flipar, estuviese leyendo esto: MIRA CAPULLO: la filosofía no da de comer, en tu puto mundo, donde lo más importante es poder tener dinero para drogarte hasta que no recuerdas ni dónde estás, comprarte un Audi con mil doscientos millones de cavallos e irte de putas siempre que te apetezca, porque no es ni medio normal el asco que se te puede coger. Pero en la vida, que es la realidad verdadera, la filosofía tiene, no mucho, sino de la hostia de importancia, porque no puedes dirigirte si no filosofas. Tu vida puede ser una puta mierda, como la tuya, o puede ser una vida que aspire a la plenitud y al pleno desarrollo de tu potencial, que es aquello a lo que aspiran todos los que hacen filosofía. Filosofía: amor por la sabiduría.
Desde luego que de los necios hay que huir como de la peste.
¿Qué pasa con aquellos que desarrollan un mínimo de coherencia, de conocimiento?
Que se mueren de hambre. En esta sociedad así es, porque no es "rentable".
Ya.
Por eso se va como se va. Por eso este puto mundo se parece a todo menos a un lugar tranquilo en el que vivir.
Y porque hay millones de capullos (espero que no tan capullos como el susodicho) que además apoyan todo esto, porque, lo dicho, lo importante es irse de putas, drogarte hasta que no tienes ni puta idea de quién eres (por lo visto, es eso lo que persigue, porque ni él mismo se aguanta) y comprarse un Audi.
Por eso todo esto va como va.
No es labor mía explicar el por qué de las cosas: cada uno que investigue lo que crea oportuno, pero sólo diré algo: vivimos al amparo de lo que se coció en la Grecia Antigua. El eco que nos llega de allí es de las pocas cosas que aún salvan todo lo que hoy es. Y cada vez está más debilitado.
¿Se puede explicar Grecia sin la cultura?
No sé: ¿a un griego de su época, o a un egipcio (Grecia bebe del Nilo), si se le preguntase acerca de la importancia de la cultura en una sociedad, se reiría por considerarla insignificante y absurda?
¿O la respuesta sería más bien de humildad y entendimiento?
Creo que más bien sería la segunda opción.
Pues está claro que esto no es Grecia. Está muy claro, tan claro que ya, hoy en día, no existe apenas el analfabetismo, pero todo está plagado de analfabetos, que no tienen ni puta idea de nada. Analfabetos ilustrados, eso es lo que se cuece aquí. Por no decir que las faltas de ortografía son el pan nuestro de cada día, y no hay que mirar muy abajo: los propios licenciados, los propios universitarios tienen faltas garrafales.
Yo tenía una profesora (la Bertos) que suspendía un examen (un examen de quince o veinte folios) `por una sóla falta de ortografía. Un examen que ya podía ser el de un catedrático en arte renacentista, que por una falta estaba suspenso.
¿Creen que la Bertos seguirá en las mismas?
Yo creo que, como siga así, los pocos (poquísimos) que lograban aprobar su asignatura, se reducen a cero patatero.

Volvamos a mí.
Soy Licenciada en Historia del Arte desde hace ya bastante tiempo, pero eso es lo de menos. Voy a hablar en plata, y voy a decir que tengo una cultura que tira para atrás. Y no es ni narcisismo ni nada por el estilo. Es observación, y comprobación.
Lo importante aquí no es lo que podría ganar, sino lo que podría hacer con todo lo que conozco. Pero resulta que no es "relevante". Que u opositas para repetir como un papagayo todo el temario oficial de el puto instituto de los cojones (que además es totalmente superfluo y vano, es la verdad) o de camarera.
Ya, pero es que de camarera también existe un problema: exceso de formación. Y pasan de ti como de la mierda.
Les quisiera preguntar a aquellos que cobran para hacer que esto funcione.
¿Esto funciona?
¿Son capaces de crear las condiciones óptimas para el óptimo desarrollo de una sociedad?
Creo francamente que básicamente son un atajo de incompetentes, hijos de puta, vanidosos, entrometidos, gilipollas, incultos y avariciosos. Eso creo que son.
Savonarola en su tiempo fue dañino. No sé si ahora lo sería tanto.
Lo mismo no estaría mal que apareciese otro Savonarola. Pondría un poco de orden.
¿Por qué, individuos que están preparados, que son competentes, que son íntegros (conozco a unos cuantos)no tienen, ni de lejos, la oportunidad para dar aquello que tienen para mejorar las cosas?
¿Por qué en cuanto lo intentan hacer se les tacha de arrogantes y sabihondos?
¿Por qué?
¿Porque estamos en una sociedad en la que la norma es la mediocridad, y además se exhibe como si fuese una virtud, y la incompetencia, la pereza y todos lo peores vicios se ven como lo más normal, porque casi todo el mundo lo practica?
¿Porque aspirar a que la humanidad se eleve (la humanidad de cada uno) de máquina, o de tarugo, o de animal a ser humano no es rentable????
¿Por eso?
PUES MENUDA PUTA MIERDA DE SOCIEDAD.
¿Es para eso para lo que estamos aquí?
¿Para comulgar con ruedas de navajas, para irnos menos evolucionados de lo que hemos llegado, para convertirnos en asnos, en mierda pura?
¿Para eso?
NO. LA VIDA NO ES ESO. Y todos los que vayan en contra de ella, son unos asesinos.
Y punto.

domingo, 23 de mayo de 2010

Veamos....hoy me he despertado bastante clara clarinete

Voy a hablar, por ejemplo, de Freud.
Nunca ha sido santo de mi devoción, eso por delante. Reconozco sus méritos, pero a fuerza de estudiarlo (no demasiado, la verdad) he reconocido que la visión que tiene Freud del ser humano es básicamente patológica, aunque en muchos casos acierte en cosas.
Hablemos ahora de los griegos.
¡Grecia! Ese gran abrevadero que tenemos a nuestra disposición, las bases de nuestra cultura (que básicamente está degenerada, pero vamos......a muerte).
Los griegos distinguían entre Eros y Ágape.
Los dos términos se refieren al amor, pero hay una gran diferencia entre los dos.
Eros se refiere al amor carnal, o a lo que tiene que ver con la libido.
Ágape es sin embargo el amor espiritual, el que tiene que ver con el desarrollo del alma, y donde brilla como flor especial la compasión.
Eros es el inicio. La evolución lleva a Ágape.
Ágape es la meta. En Ágape todo se metamorfosea, se transforma, y el humano que llega al estadio de Ágape bebe de la ambrosía de los dioses. Ágape es amor en estado puro.
¿Significa por ello que Eros es desechable, por ejemplo?
En modo alguno: para el desarrollo de Ágape es imprescindible pasar por Eros, y trascenderlo.
He dicho trascenderlo: no es únicamente dejar pasar, sino probar tanto Eros que ya no satisfaga, y entonces entrar en otro estadio más elevado.
Y no es que cuando se entra en Ágape, Eros deje de existir.
Hablemos ahora de Ken Wilber.
Ken Wilber es, posiblemente, el filósofo contemporáneo más locuaz, más lúcido y mejor informado de todos los que ahora existen. Él llega a la conclusión (lo mismo que muchos otros investigadores de otras ramas, como la física cuántica, la psicología transpersonal, etc.) de que la realidad es holográfica, y no hilográfica, como nos han contado.
La propiedad del holón (para más información, recomiendo la lectura de "Breve historia de todas las cosas" o "Una teoría de todo") es la de incluir y transcender a otros órdenes evolutivos inferiores (entiéndase por inferior algo que en jerarquía está por debajo como sistema de organización). Por ejemplo: una molécula incluye y transciende a los átomos, una célula incluye y transciende a las moléculas, un órgano incluye y transciende a la molécula, y todo esto ad infinitum. O sea: que nada está separado de nada. Y cada sistema más elevado que el anterior tiene su propio orden, su propio esquema de funcionamiento. Un átomo tiene sus leyes. Pero una célula tiene sus propias leyes. Y un organismo tiene las propias. Y así ad infinitum.
Esta es más o menos una explicación somera de lo que es un holón.
Básicamente, Ágape es un holón superior a Eros: incluye y transciende a Eros. Y además tiene una forma más elevada de funcionamiento, con otras leyes.
La ley de funcionamiento tiene en base un estado de conciencia más elevado.
Volvamos a Freud.
Freud describe un triángulo básico en la personalidad de un humano, y determina por su adecuado equilibrio la salud mental de dicha persona.
Ese triángulo básico está formado por el ego, el super-yo y el yo.
Según él, todos estos elementos tienen que estar en armonía entre sí, o si no, se produciría la enfermedad.
Si hay, por ejemplo, una desproporción del super-yo, se puede dar histerias, depresiones, actitudes compulsivas, etc.
El super-yo es la estructura crítica del individuo. Si supera ciertos límites (aquellos que manda el sentido común, es decir: la sensatez) se puede producir una patología, como un grave sentimiento de culpa, por ejemplo, que desencadenaría otras enfermedades. También puede llevar a actitudes tiránicas basadas en el autoritarismo. El super-yo son reglas externas que hemos interiorizado.
¿Y el ego? ¿Qué pasa con el ego?
El ego se puede explicar de muchas formas. Básicamente es orgullo. No es amor propio, sino orgullo.
Una estructura que tenga un desarrollo anormal del ego puede conducir perfectamente al narcisismo.
El egoísmo es básicamente colocar al ego por delante del yo.
El yo. ¿Qué es el yo?
El yo es nuestro ser esencial.
Hay mucha confusión hoy en día (hoy en día sobre todo...de forma apabullante además) respecto al yo y al ego. El ego no es el yo. Básicamente se puede decir que el ego sabotea constantemente al yo esencial.
Aquí difiero con Freud. Alguien que vaya cultivando su yo esencial se libera de todo sufrimiento.
Es una visión que comparten, por ejemplo, los budistas.
Hablemos de Nietszche. Él habla del súper hombre. Según él, el super hombre ha logrado matar al padre y a la madre. ¿Qué significa esto?
Hablemos de Erich Fromm. Erich Fromm (psiquiatra) reconoce que la madurez y la estabilidad en una persona, (en suma: la felicidad), el autogobierno, se produce cuando la conciencia materna y la conciencia paterna se hallan presentes en el individuo, pero de forma que sea el propio individuo quien las produzca, de forma productiva....Es decir: cuando las ideas, concepciones, esquemas, etc., se produzcan en la propia individualidad de esa persona, que sea ella el auriga del carro de Platón. Que no le guíen concepciones ajenas a él, sino que haya llegado a un estadio de desarrollo óptimo, y que sea él, con la razón y a la luz de su propia conciencia el que de salida creativa y productiva (no pasiva) a sus propias concepciones. La conciencia materna de esa persona le diría al individuo: hagas lo que hagas, te seguiré amando. Te amaré siempre. La conciencia paterna de esa persona le diría al individuo: esto que has hecho está mal. Si quieres que te siga queriendo, tienes que rectificar. Así se produce el desarrollo evolutivo de una persona. Pero no es ni el padre ni la madre los que dictan esas normas, sino el propio individuo.
Ese es el camino para Ágape.
Esta es función del yo esencial.
Es un error (muy grave, además) considerar que es función del ego.
No se trata de "hacer lo que me salga de los cojones", sino de hacer aquello que has de hacer. Evidentemente, por ejemplo, en lo que has de hacer se incluye el amor hacia uno mismo, y buscar la posibilidad de ser tú mismo, que es la máxima libertad a la que se puede llegar.
Pero para eso, se requiere coraje. Una de las cosas que hay que vencer en ese proceso es al mismo ego. El ego tiene mucho de "¿qué pensarán los demás de mí si hago esto o lo otro?".
Creo que mientras no se haga daño a nadie (daño de verdad. Ofender al ego de otro no es hacer daño, pero claro, primero tienes que saber diferenciar qué es una cosa y qué es otra), uno debe, tiene la obligación de ser libre. Y punto. Es una cuestión de elección, pero creo que este mundo sólo andará bien cuando cada hijo de vecino apueste por sí mismo y su propia felicidad. Así que sí: es nuestra obligación. Es la única obligación que realmente existe en la vida: BUSCAR LA FELICIDAD. Y serlo. Luchar, tanto como sea necesario, y llegar a ser lo que somos en realidad: Ágape, conciencia pura, equidad, amor y sabiduría. FELICIDAD.
Y quien no lo haga, para él hace.
Y para los demás.

¿Qué pasa en esta sociedad?
Esta sociedad alienta al ego Así nos va. Si hay una desproporción de algún elemento....¿Qué se produce?
Sí, bingo: la enfermedad.
¿Y qué pasa cuando la enfermedad está tan extendida porque es carne de masas?
Efectivamente, queridos míos: la enfermedad pasa a considerarse como lo "normal", porque ya nadie es consciente de la enfermedad por hallarse tan tipificada. O sea: que lo que hoy llaman "normalidad" es enfermedad. LO QUE HOY LLAMAN "SALUD" ES ENFERMEDAD.
Pues queridos míos, un consejo: aténse los machos, que llegan curvas.

sábado, 1 de mayo de 2010

El gran tabú de Occidente

Me declaro enemiga de la dinámica autodestructiva de esta sociedad, y ante todo de su minoría de edad, cada vez más alarmante.
Siempre en Occidente se ha tenido pánico a la muerte.
Occidente vive en una nube. Vive en la mentira. Nadie parece entender (una cosa es saber que eso va a pasar, otra muy distinta actuar en consecuencia) que la muerte es una parte fundamental de la vida, la más importante junto con el nacimiento.
No es de extrañar entonces que Occidente esté siempre en un sempiterno vagabundeo en la minoría de edad, PORQUE NO QUIERE CRECER.
Occidente es gugu-tata. No mamá: no quiero que eso exista, así que hago todos los esfuerzos (¿?) para que no exista.
Occidente ha olvidado a Dios (ponedle el nombre que queráis: Tao, Absoluto, Infinitud, Energía del Kosmos: un Algo que nos supera a todos y que nos contiene a su vez. Algo más elevado que está por encima de cualquier otra cosa, que está Más Allá de cualquier otra cosa. Trascendencia: he ahí la clave) porque cree, en sus sueños pueriles, que ha vencido a la muerte, NEGÁNDOLA (menuda gilipollez). Se da la espalda a la muerte, se actúa como si no existiese, como si fuésemos inmortales.
Cuando se produce un escape de la realidad, estamos comenzando el camino que más directamente nos lleva a la locura. La demencia es enajenación de la realidad, es decir: crear otra realidad totalmente distinta a la realidad que ES, y vivir en esa fantasía.
Occidente es una fantasía.
Se empeñan continuamente en que explotemos el lado “positivo” de la vida, y nos olvidemos de lo difícil. Lo difícil para Occidente es lo negativo. No es de extrañar que Occidente, ante todo, persiga como sueño el Estado de Bienestar, es decir: el Estado de la Comodidad.
Muy bien, esto va para los enterados: ¿es la vida cómoda?
Me pregunto. No sé: yo he comprobado, en mi historia vital que no es así.
¿Es así? ¿La vida es cómoda?
La vida es una escuela: venimos para crecer, no para involucionar, que es lo que quiere, y a lo que te obliga Occidente. Y si te pones profundo, ya tienes a cuatro gilipollas alrededor para decirte: piensas demasiado.
No habré oído veces esta frase. Es una frase de gilipollas. Y la respuesta es: no es que yo piense demasiado: es que tú no lo haces. Porque tienes miedo de lo que te vayas a encontrar. Y porque eres un perezoso de cojones que quiere que la vida sea un cuentecito para dormir a niños. Claro que es incómodo pensar, reflexionar en la muerte. Pero la solución, queridos míos, no es huir de lo que es incómodo. Eso del esfuerzo (el esfuerzo, que ahora tan mala prensa tiene en este puto estado del bienestar (o de los berrinches de niño. Yo prefiero llamarlo de esta forma)), la perseverancia, el coraje, la valentía, eso de crecer como seres humanos, de evolucionar, de convertirnos en algo más elevado que una estúpida máquina de comer, follar, consumir y quejarse una y otra vez de absolutamente todo (DE TODO. PORQUE TODO NOS PARECE INSUFICIENTE). La queja en Occidente es la bandera oficial. Y la queja es únicamente, lo recuerdo, para los que sufren una injusticia, no para cuatro gilipuertas que no han pasado de los seis años, y encima no quieren moverse de ahí….a la mierda los infantiloides de los cojones!!!(Zapatero es gilipollas. Esto porque sí. Tiene más relación de la que parece. Me parece que es de lo peor que ha habido nunca en política. Lo mismo se queda en su casa fregando platos y logra ser más eficiente. Ya hablaré del pavo este, que encima se piensa que lo está haciendo de la hostia y se ufana (¿¿¿¿?????) de ello. Me mata, de verdad)
En la vida se sufre, se ama, se nace, se muere, y si de verdad estás vivo (y no agilipollado) aprendes, y mucho. Todo lo que quieres aprender está en la vida (y no en la puta universidad o en el puto temario de las oposiciones para profesor de secundaria, que es lo que la gente piensa que es conocimiento. Minoría de edad, claro. Todas las deducciones a las que llega la minoría de edad son, como mínimo, absurdas y tontas (porque son cosas de críos!!! No estoy hablando de los niños. Los niños son mucho más sabios de lo que creemos). Y lo peor, encima, es que la peña se las cree. Y odian ni siquiera plantearse que tal vez todo no sea así…..¡Vaya! Miedo a la libertad, miedo a la vida, miedo a la muerte…..Occidente).
Yo siempre he sido buena amiga de la muerte, o más bien, ha sido desde siempre buena amiga mía. ¿Quieres dejar de temer algo? Pues ya sabes. La muerte es tan solo una etapa más, la última aquí, y no hay que temerla. Al contrario. Cuando la muerte se convierte en tu amiga, tu vida se convierte realmente en VIDA. No necesitamos nada para vivir: venimos completos, tenemos a la muerte en el horizonte.
Sánchez Dragó dice: La muerte es un seguro de vida.
Y es verdad.
¿Quieres descubrir los mil colores de esta vida? Deja de temer a la muerte, y ella se convertirá en tu mejor amiga, porque te enseñará a vivir. A vivir. Y vivir no es tener un puesto de trabajo de la hostia o ser funcionario. Vivir es ESTAR VIVO, y sentirte vivo.
Y eso casi nadie aquí lo ha experimentado. Si no, otro gallo nos cantaría.
Lo que está de moda es sobrevivir (en el peor de los sentidos) y encima, adornarlo todo con confeti, una vida de mierda, morbosa, sin consistencia, falsa, con completa ausencia de autenticidad y realismo (el realismo no es saber cómo ha quedado el Madrid o qué está haciendo la pájara de Fernández de la Vega, ese pajarraco), para que encima quede bonito….
¡y la peña se lo cree!
Joder. ¿Quiere saber usted sobre la estupidez humana y la imbecilidad en masa?
No se preocupe: tengo vuelos directos a Occidente.
Y después de hablar así, siempre llega algún gilipollas con la consabida frase: “tienes que divertirte más”.
Ya. Lo mismo a ti lo que te conviene es arrancarte la cabeza y probar con otra distinta, ¿no?
Vamos a contar mentiras, tranlará, vamos a contar mentiras…
Lo que me recomiendan, en suma, es: ven aquí, a nuestra nube de algodón con confeti, y serás más feliz. ¿Estás seguro de eso?
Ten una de esas cosas que la psicología tradicional llama “regresión del Yo”, hazte una infantiloide como nosotros, y deja de pensar en lo que es la vida (ese milagro que es la vida, que está lleno de riqueza, y de amor, y de color) para empezar a pensar qué politono te bajas en esta semana. Ya. Perfecto. Maravilloso. Es estupendo.
¿De verdad que sí? ¿Qué eso es lo que tengo que hacer?
¿De verdad?
¿A ninguno se les ocurre pensar que en realidad no hay mayor disfrute que vivir la vida al máximo (aclaro: fundirte con la vida y con todo lo que hay en ella: dolor, amor, sufrimiento, decepción, sabiduría…No sólo el lado “bonito” (salir de marcha)?
Lo que quieren es, básicamente, no tener que salir nunca de esa nubecita.
Ya.
No es que te preocupe yo: te preocupas tú (innecesariamente, porque la vida es un Edén, a pesar de todo lo que tiene, o más bien por eso mismo) por tu extremo pánico a vivir.
Y a morir, claro.